El queso en España es más que tradición. Es más bien un estilo de vida que se disfrute y se comparte en todos los rincones del páis.
El queso que más se come en España varía dependiendo de la región, ya que cada zona tiene sus propias especialidades y variedades de queso. Sin embargo, algunos de los quesos más populares en todo el país son:
- Queso Manchego: un queso de oveja originario de la región de La Mancha, con un sabor suave a intenso y una textura firme y compacta.
- Queso Idiazábal: un queso vasco-navarro hecho con leche de oveja, con un sabor ahumado y una textura semidura.
- Queso Cabrales: un queso azul asturiano hecho con leche de vaca, cabra y oveja, con un sabor fuerte y una textura cremosa.
- Queso Tetilla: un queso gallego hecho con leche de vaca, con un sabor suave y una textura cremosa y blanda.
- Queso Mahón: un queso de leche de vaca originario de la isla de Menorca, con un sabor suave y una textura semidura.
Estos son solo algunos de los muchos quesos populares en España, y cada región tiene sus propias variedades y especialidades únicas.
El queso en España: Hablemos sobre el queso manchego… el más tradicional
El queso manchego es un queso de origen español elaborado tradicionalmente con leche de oveja de la raza manchega. Aquí te presento una receta básica para hacer queso manchego en casa:
Ingredientes:
- 5 litros de leche de oveja (preferiblemente cruda)
- 1/4 de cucharadita de cuajo líquido o en polvo
- Sal gruesa
Utensilios:
- Termómetro
- Paño de algodón
- Molde para queso
- Prensa para queso
Instrucciones:
- Calienta la leche en una olla a fuego medio, revolviendo constantemente, hasta que alcance una temperatura de 32-35 grados Celsius.
- Añade el cuajo líquido o en polvo y revuelve suavemente durante unos segundos. Luego, deja reposar la mezcla durante unos 30-40 minutos, hasta que se forme un coágulo.
- Corta el coágulo con un cuchillo en forma de rombos, y remueve los trozos suavemente con una cuchara.
- Luego, pon el queso en un paño de algodón y envuélvelo para formar una bola. Ajusta el paño para que la bola esté bien compacta.
- Coloca la bola de queso en un molde para queso y presiónala con una prensa para queso durante 6-8 horas, añadiendo sal gruesa al queso durante el proceso de prensado para que el sabor penetre.
- Después de las 6-8 horas, saca el queso del molde y sumerge la bola en una solución de salmuera durante al menos 24 horas para salarlo.
- Finalmente, deja que el queso se seque al aire durante unos días, volteándolo regularmente, hasta que se forme una corteza firme.
¡Y ya está! Ahora tienes tu propio queso manchego casero para disfrutar en tus comidas o aperitivos.